Compositores: Patrimonio de mi esencia

Cuando yo era niña escuchaba mucho la historia cantada de un hombre que transitaba senderos abruptos y se tropezaba con un ángel; caminaba sobre sus pasos enfrentando sus fracasos y más tarde se cobijaba con unos brazos de desprecios y deseos. Por más que mi imaginación infantil intentaba pintar ese paisaje, no lo lograba; mis pensamientos no podían darle forma a esos relatos. Más tarde, a mis oídos llegó la historia de otro hombre que era la añoranza de un verso y que terminaba condenado por las gotas de llanto de una mujer… ¿Cómo es eso? Era la pregunta que siempre surgía ante las limitaciones de mi imaginación para dibujar las imágenes.